España, uno de los países con mayor tradición montañera del planeta, necesitaba un libro así. Una obra grandiosa destinada a todos aquellos que sueñan con grandes espacios abiertos, cumbres nevadas y paredes de roca. La Biblia de todos los alpinistas y escaladores, y una fuente inagotable de información para caminantes.
Porque esta «Enciclopedia de la montaña» no es sólo el libro de cabecera de aquéllos que viven entre las nubes: en sus más de 600 páginas, escritas con letra diminuta, también encontrarán refugio los que, desde valles y laderas, disfrutan con la zoología y la botánica, con la geología y la geografía, con la historia, la cultura y la leyenda...
El autor, que ha contado con la colaboración de algunos de los grandes especialistas en literatura de montaña de este país, recorre todas las cordilleras, picos y macizos del planeta, describe sus principales rutas y actualiza los datos más destacables.
Más de 200 artículos biográficos nos acercan a los montañeros más importantes de todos los tiempos, desde pioneros como Walter Bonatti o George Mallory a héroes de nuestro tiempo como Reinhold Messner, el hombre de todos los récords.
La mitad de estos perfiles, la que corresponde a escaladores y montañeros españoles, ha sido realizada con la participación de los propios interesados, que han respondido a un cuestionario realizado para la ocasión.
Así sabemos que Juan Oiarzabal, de profesión pescadero, es el sexto hombre, primer español, en ascender a los catorce ochomiles de la tierra. O que la catalana Araceli Segarra se convirtió el 23 de mayo de 1996, con 26 años, en la primera española en subir a la cumbre de la montaña más alta del mundo: el Everest.
Esta es la tercera obra de estas características que se publica en el mundo, la primera en castellano. Un trabajo ambicioso y arriesgado que no comete el error más común en este tipo de proyectos: tratar de recoger todo el saber, todos los conocimientos, de un campo determinado. Esta enciclopedia es una obra abierta, una guía útil donde encontrar no sólo información, sino también momentos de lectura grata.
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